Unidad de Nutrición y Obesidad
Hospital Cruz Roja de Córdoba
Testimonio de Pilar Barroso, paciente para tratamiento de la obesidad
Unidad de Nutrición y Obesidad – Cirugía bariátrica
Pilar se ha sometido recientemente a una cirugía bariátrica no tanto para perder peso desde un punto de vista estético, que también, sino para evitar posibles enfermedades en un futuro. Hoy, después de 4 meses de la intervención, ha perdido 25 kilos y también apetito pero a su vez, ha ganado en agilidad, confianza y sobre todo, tranquilidad.
Pilar nos cuenta que empezó a coger peso desde su desarrollo, algo que le ha llevado a probar prácticamente todos los tipos de dietas que existen pero sin resultados positivos. “Probaba todas, algunas por mi cuenta, otras bajo supervisión pero nada, cuando volvía a hacer vida normal, recuperaba de forma alarmante el peso. En la última perdí 15 kilos pero en 6 meses, recuperé 20”, nos cuenta Pilar quien añade que nunca le han dado ninguna explicación médica aunque la predisposición genética y el sedentarismo son aspectos a tener en cuenta en relación al peso.
Cuando el Hospital Cruz Roja de Córdoba anunció la apertura de la nueva Unidad de Nutrición y Obesidad, se interesó en un primer momento por el balón intragástrico ya que era de lo que había oído hablar para perder peso. Tanto es así que pidió cita con el Dr. José Luis Domínguez – especialista en Digestivo del Hospital, quien realiza las técnicas endoscópicas para el tratamiento de la obesidad: balón intragástrico y método POSE – para informarse. Tras un necesario “interrogatorio” sobre hábitos de vida fundamentalmente y su historia, dado su perfil el Dr. Domínguez le recomendó acudir a los cirujanos para informarse de la cirugía bariátrica.
Fue cuando acudió al Dr. Juan Castilla, cirujano de la Unidad de Nutrición y Obesidad del Hospital quién se interesó por sus hábitos de vida y le prescribió una batería de pruebas que necesitaba para valorar en primer lugar, si era apta o no para la cirugía bariátrica y en segundo lugar, para ver qué tipo de cirugía podía ser la más adecuada.
Esas pruebas concluyeron con que Pilar era apta para la cirugía y así se lo recomendó el cirujano, aunque por una razón muy distinta a la estética. “El Dr. Castilla me indicó que era recomendable la cirugía bariátrica ya que de continuar cogiendo peso, podía generar patologías asociadas en un futuro más o menos próximo, como diabetes, tiroides, problemas cardiacos, etc.”, nos comenta Pilar quien nos reconoce que ese había sido siempre su temor. “Ahora tengo 32 años, pero yo sabía que con 40 o 50 años podía tener dos problemas, el del peso y el de estas enfermedades”.
El Dr. Castilla le explicó a continuación los tipos de cirugía bariátrica que existían, con todo lujo de detalles, con objeto de que ella y sus familiares tuvieran todo muy claro. Y le indicó que dado su Índice de Masa Corporal, su perfil y otros aspectos, la técnica más recomendable era el Bypass gástrico, algo más agresiva pero más efectiva.
Pilar se puso en sus manos y en noviembre le realizaron la operación. Veinte días antes, tuvo que hacer una dieta de líquidos y triturados, que recogía distintas opciones, entre ellas, unos batidos preparados que le proporcionaron en el Hospital.
La operación fue un martes y el viernes ya le dieron el alta. La cirugía duró unas tres horas y media, y posteriormente la ingresaron en la Unidad de Cuidados intensivos para hacerle seguimiento. Pilar nos cuenta que tuvo molestias durante las 24 horas posteriores a la operación, todo dentro de la normalidad.
A partir del alta, Pilar pudo hacer vida normal aunque con una dieta personalizada desde entonces, en la que va añadiendo progresivamente los alimentos, siguiendo las indicaciones y bajo un estricto control y seguimiento por parte de la nutricionista, a quien ve cada quince días para resolver dudas, controlar el peso y para seguir sus consejos nutricionales. A partir del cuarto mes después de la operación, aunque no tiene “alimentos prohibidos”, sigue teniendo un continuo control de lo que come.
Y por parte de la endocrina de la Unidad, Concha Muñoz, quien le pide una nueva analítica cada mes y medio aproximadamente.
Tras este proceso, Pilar nos cuenta que “Se lo recomiendo a todo el mundo. También tengo que decir que no es un camino de rosas, que hay momentos duros, que hay alimentos que no te sientan bien, pero el mismo cuerpo te va guiando, te ayuda a cambiar hábitos y al final, sabes perfectamente qué comer y qué no, y sobre todo, cuánto. Yo me sacio con muy poco…”
“Estoy muy contenta – continúa – porque el 10 de noviembre empecé todo el proceso con 110 kilos. Hoy peso 83 y esa diferencia se nota mucho, en agilidad, a la hora de andar, en el trabajo… En definitiva, en todo”.
Pilar no quiere terminar sin decir que el compromiso y la implicación del paciente es fundamental, que sin eso no es posible. Y es algo que le piden los propios cirujanos. La efectividad y los buenos resultados vendrán si el paciente contribuye antes, durante y después del proceso.
Y tampoco quiere eludir algo muy importante en lo que nos insiste: “Todos los médicos son super cercanos, te sientes arropada en todo momento, y hay un control y seguimiento constantes…”
Unidad de Nutrición y Obesidad – Hospital Cruz Roja de Córdoba
Tratamiento obesidad – Consulta de nutricionista en Córdoba
Cirugía bariátrica – Bypass gástrico…
Si lo desea puede solicitar una cita con nuestros especialistas de la Unidad de nutrición y obesidad.